Nací en Asunción, 1971. Miembro de una familia industrial, decidieron enviarme a Alemania para formarme como ingeniero y sucesor. 20 años fueron necesarios para darme cuenta, que los modelos que me transmitieron no funcionan ni aquí ni allá.

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Estoy haciendo una pausa con lo que nos cuentan los expertos sobre la eficiencia, la innovación, el Desarrollo Humano, incluso la Democracia, y el infaltable liderazgo. No todo es lo que parece en las Economías. 

 

Tampoco ya no creo en esto de que errar es humano. Tal vez lo humano son otros elementos que se juegan y que llevan a las personas, las empresas, las democracias a fallar. Tengo comprobado, que de esto no se desea hablar. El desafío es ahora conmigo mismo, uno que me fuerza a hacerme las mismas preguntas, pero ahora mis respuestas son distintas.

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¿Por qué firmé el libro así; «...y Christian Eulerich?

En mi comprensión de hoy, nadie escribe un libro ni hace nada solo. Detrás nuestro siempre hay otras voces que son parte de la historia personal y el imaginario colectivo. Sin embargo, los modelos imperantes inculcan miradas que nos fragmentan y para colmo no resultan; es algo comprobable a simple vista, pero hay que querer verlo.

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¿Es posible construir algo distinto, pero esta vez juntos?